A contramano del clima de incertidumbre que domina los mercados, el banco de inversión Morgan Stanley difundió un informe en el que recomienda posicionarse en bonos y acciones argentinas en la previa de las elecciones legislativas. Según la entidad, la ca
02/09/2025 11:07 — NacionalEl reporte, titulado “Apuesta alcista por la Argentina hacia la temporada electoral” (Long Argentina into the Election Season), fue publicado el 2 de septiembre de 2025 y analiza los riesgos y oportunidades de la economía argentina en el contexto político actual.
Morgan Stanley consideró que los precios actuales reflejan “una probabilidad excesiva de un resultado adverso” y, en consecuencia, ofrecen espacio para un repunte en caso de que se confirme la continuidad de las reformas.
El análisis destacó que La Libertad Avanza (LLA) podría ampliar su representación en Diputados —de 39 a 86 bancas, según las proyecciones—, lo que le permitiría sostener un eventual veto presidencial. El Senado ofrece menos margen de crecimiento, aunque el verdadero termómetro será la elección legislativa en la provincia de Buenos Aires, prevista para el 7 de septiembre.
En paralelo, el banco observó que, tras las elecciones, podrían ajustarse algunas variables del plan económico: una reducción de la restricción monetaria y la implementación de un esquema más flexible para acumular reservas internacionales. Además, identificó como claves futuras reformas laborales, tributarias y previsionales que reforzarían la credibilidad del programa de estabilización.
El informe puso el foco en los comicios bonaerenses, que concentran el 38% del padrón electoral. Según Morgan Stanley, un resultado favorable al oficialismo podría disparar un rally en los mercados, mientras que un desenlace adverso podría intensificar las presiones cambiarias y forzar una política monetaria más dura.
Los analistas advirtieron: “Si los mercados leen el resultado de la provincia de Buenos Aires como favorable a la continuidad de la política, el gobierno podría relajar la actual restricción monetaria. Si no, habrá más tensión cambiaria.”
El banco enfatizó que los bonos argentinos quedaron muy rezagados frente a otros emergentes: mientras el índice de deuda de alto rendimiento global subió 9% en 2025, los títulos locales apenas avanzaron 0,4%.
La recomendación fue aprovechar esta corrección como un punto de entrada, priorizando posiciones en bonos largos en dólares, en especial el ARGENT 41. En el escenario base, Morgan Stanley espera que los rendimientos bajen de 10% hacia fin de 2025, lo que implicaría una ganancia de unos 11 puntos en precio o un retorno total de alrededor del 20%.
En un escenario optimista, los spreads podrían acercarse a niveles de la gestión Macri; en uno adverso, la baja alcanzaría los 10 puntos; y en el más severo, los bonos caerían a la zona de 30-31 dólares.
El banco también recomendó sobreponderar acciones argentinas dentro de su portafolio latinoamericano. Seleccionó tres compañías como preferidas: Banco Galicia, Vista Energy y Loma Negra, que suman 3 puntos porcentuales en su cartera modelo para la región.
El fundamento es la valuación: la bolsa argentina cotiza a 7,9 veces la ganancia proyectada, con un descuento frente a Chile, Brasil y México. Las acciones cayeron 25% en dólares en lo que va de 2025, aunque la mitad de esa baja se explica por la depreciación cambiaria.
Para Morgan Stanley, un eventual proceso de liberalización cambiaria, acompañado de reformas laborales y fiscales, podría reactivar la renta variable.
El informe no dejó de lado los riesgos. Señaló la elevada necesidad de financiamiento externo, con una deuda que podría alcanzar los USD 352.000 millones en 2030 según proyecciones del FMI. También advirtió sobre juicios internacionales que comprometen a la Argentina.
El más relevante es la demanda por la expropiación de YPF, con una condena de USD 16.100 millones en un tribunal de Nueva York, cuya apelación se resolverá en octubre. A esto se suma la sentencia por los warrants del PBI en euros, que obliga a un pago de EUR 1.520 millones correspondiente a 2013.
Morgan Stanley señaló que el Gobierno deberá resolver estos compromisos con efectivo o nuevas emisiones de deuda, como ocurrió con Repsol en 2015.